Nace en 1967, en el seno de una familia leonesa, berciana y orníaca a partes iguales. Crece oyendo cuentos e historias, algunas de las cuales eran maravillosas, del patrimonio universal; otras familiares, desconocidas para el mundo, pero igualmente apasionantes. Muy pronto comienza él a contarlas también. Hasta la fecha ha publicado tres libros de relatos: La bisagra (Ed. Brujazul, 1996), Clavos en el viento (Ed. Adarve, 2020) y Un trozo de queso (Ed. Adarve, 2022). En 2023 se alza con el prestigioso Premio Nostromo de novela con Caira: la Grecia olvidada, publicada por EDHASA en 2024.

Leer primeras páginas

¿Nos cuentas algo de ti, para empezar?

En otras ocasiones he hablado de mí. Te aseguro que es lo que menos me gusta. A veces, a los poetas les preguntan por el significado de lo que han escrito. Supongo que, si quisieran hablar de significados, hubieran hecho ensayo, no poesía. A mí me pasa algo parecido. Mi vida es un índice personal, como el catálogo de una editorial ( que, al fin y al cabo, es la obra del editor). Quizá pulsando en cada hipervínculo de ese índice se vea una parte de mí. En este momento estoy en un capítulo muy interesante, muy creativo.

Las brañas son los pastos altos de León, Asturias, Galicia, esos que siguen verdes en agosto..

Así es.

¿Y la novela “En las brañas”? ¿Qué nos dices de ella?

Me resulta bonita. Nunca había escrito nada más largo de cinco páginas. De hecho, mi obra está compuesta de relato y cuento, en ocasiones mínimo. Aprovecho cada milímetro de una sílaba. “En las brañas” es mi primera novela escrita, aunque “Caira: la Grecia olvidada” es la primera publicada”. Soy un gran lector de novela, de todos los géneros literarios, pero creo que sobre todo de novela. Cuando me planteé “En las brañas”, quise hacer algo que a mí me gustara leer. Con ese criterio la escribí. Los valores de las grandes novelas de aventuras junto con las líneas imborrables de los contadores de cuentos de mi familia.

¿En qué reside la fuerza de este libro?

Alguien me ha dicho que las escenas de animales son muy potentes. Eso es lo que me contaban mi padre y mi madre, esas escenas están creadas a partir de historias familiares. Los lobos, sobre todo, han sido parte de la vida de la gente de mi tierra desde siempre. Pero creo que toda la historia tiene brío y los personajes tirón. Además, todas las localizaciones, las reales y las ficticias, tienen un sentido especial para mí, están en mis raíces, y eso es normal que se note. Quizá la fuerza de la obra reside, principalmente, en que nace directamente de los lugares en que me crié. No en vano, el título es un lugar.

Aún no nos has contado nada del argumento…

¡Ya! Está ambientada en el siglo X d.C. León es un lugar frágil, que está en la mente del caudillo Almanzor como uno más de sus objetivos militares y de rapiña. Las aceifas eran campañas de saqueo habituales hechas por los árabes en cualquier punto de4 la península. En el año 994, las tropas de Almanzor amenazan llegarse a León. La trama se construye antes de que eso ocurra, con el miedo, y durante la llegada de los árabes, cuando es inevitable defender la ciudad de León del cerco y el asedio correspondiente.

Eso es la ambientación histórica. Los personajes y sus pequeñas vidas e intereses son los que construyen la novela.

¿Cómo describirías tu trayectoria de escritor desde la primera publicación hasta esta última?

Comencé muy jovencito a escribir. Toda mi vida ha estado marcada por el escribir. Y siempre me ha hecho feliz. Eso no ha variado nunca. En ocasiones, he narrado dramas terribles, pero cuando he puesto el punto final, medio ahogado por mis propias palabras y en estado de shock, he sentido, sobre todo, felicidad por haber logrado transmitir lo que quería. Eso no ha variado con los años. Mi trayectoria, por tanto, es inexistente, ha sido una felicidad permanente. Si te refieres a la parte de publicar, eso es otra cosa, pero anecdótica para mí. Me gusta publicar, se agradece el reconocimiento, pero jamás será equiparable al placer que experimento al colocar un punto y seguido bien puesto.

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

Últimamente no tengo ningún “libro terminado” especial. Los de poesía los releo a trozos continuamente, para teatro, me gusta ver las representaciones de Estudio1 en TVE. Al fin y al cabo, el teatro es representación, no narración, como dijo Aristóteles en su Poética, (cosa que tanto les costaba entender a los árabes que participaban en aquel relato de Borges, “La busca de Averroes”: representación, ¿qué es eso? Claro, el suyo es un mundo de tradición narrativa oral) Siempre estoy variando el último libro que leí, Ya ni sé cuál es.

¿Y en cuanto a proyectos, tienes alguno a pronta vista?

Siempre escribo. Siempre leo. Si con proyectos te refieres a cosas publicables, en EDHASA están valorando ahora una novela ambientada en el mundo de los actores de mimo en el siglo I a.C. También tengo acabados dos libros libros de relatos. Y como poeta, vaya atrevimiento, ultimo también un proyecto. Sin embargo, lo que más me gustaría sacar adelante es un libro de prosas muy cortas, muy muy cortas, que me ha gustado y costado escribir.

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