Guillermo García Campos
Compositor, autor, intérprete y músico profesional en el seno del grupo musical chileno Quilapayún, ha ejercido como periodista en París y Bruselas y ha sido profesor de música de Educación Secundaria en la comunidad francófona belga.
ISBN: 978-84-10400-00-9
ISBN digital: 978-84-10400-01-6
Depósito legal: M-15209-2024
Número de páginas: 196
Formato: 130×200
Autor: Guillermo García Campos
Sinopsis: He aquí este conjunto de relatos, un ensamble de realidad y ficción, la lectura de hechos humanos: vivencias comunes que, de una u otra manera, nos atañen. A algunos de ellos he buscado, de manera consciente, no situarlos en ciudades, calles, barrios o países —bien que inspirados en América Latina, mi subcontinente de origen—. Todo ello para tratar de probar que son cosas que suceden en cualquier parte, que solo hay que observarlos de cerca o revivirlos en nuestra memoria para saber que los hemos experimentado en carne propia. En otros, la ficción es más acentuada, nunca fantástica porque no es mi objetivo. Los hay localizados en Europa, ligados o no a la historia reciente de Sudamérica, a la trama de violencia desencadenada por las dictaduras de las décadas de los 70 y 80 (época en la que fui partícipe). He querido escribirlos en un lenguaje accesible, que no dificulte su lectura, para que sean coloquiales. Tampoco he pretendido complicarlos entrando en profundidades filosóficas, morales o políticas. Relatos escritos con simpleza no exentos de riqueza lingüística, de exigencia literaria; de poesía.
Háblanos un poco de ti.
Soy Guillermo García Campos, chileno, residente en Bélgica, país al que llegué después de haber vivido en Francia como exilado político. Llegué a Europa en el año 1974. Fui durante muchos años músico: instrumentista, cantante, autor, compositor, además de otros oficios, como el de periodista o profesor de música, entre ellos.
¿Qué podremos encontrar entre las páginas de Relatos breves y aderezados?
Lo que se encontrará en estos relatos, es una humilde mezcla de ficción y realidad, es decir: cosas inventadas, otras que escuché, que me contaron, que inclusive viví o que observé, pero que mi imaginación transfiguró convirtiéndolas en estos cuentos.
¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?
Es difícil responder a esta pregunta, porque, personalmente, creo que es el lector quien encontrará fuerza en ellos, pero, yo diría que tienen la pujanza de ser frescos, novedosos, mezcla de reflexión seria y liviana, de poseer poesía, ternura y también dureza, como la vida misma.
¿Qué quieres transmitir a través de este libro?
Sin pretender nada extraordinario, creo que lo que busco, es simplemente comunicar, lo que mis sentidos viven, lo que mi imaginación crea. Aquello es una necesidad imperiosa, comunicar es una razón vital para mí.
¿Cómo describirías tu trayectoria de escritor desde la primera publicación hasta esta última?
Solo tengo la experiencia de haber publicado artículos de prensa, ellos me aportaron un placer profundo, me enseñaron la rigurosidad, la objetividad, la coherencia, la ética. Todas cosas que me marcaron profundamente. Pero llegar a este libro, es un placer inmenso, es una especie de liberación total, volar al fin, libre como un pájaro.
¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?
Lo último ha sido a Edgar Morin: “L’année a perdu son printemps”. Que quiere decir: “El año ha perdido su primavera”. Lo leí porque admiro profundamente a este autor, quien ha sido sociólogo y filosofo. Está entre aquellos autores, cuya lectura me ha formado.
Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?
Sí, lo tengo, es la publicación de un libro de poesía, que hará un recorrido por los poemas que he escrito desde mi llegada a Europa.