Me trasladé con mi pareja y nuestros dos gatos a un precioso pueblo de la sierra madrileña hace tres años. Estamos muy cerca de la montaña y la disfrutamos mucho.
Soy Doctora en Letras Hispánicas y Graduada en Filosofía, así que me dedico a la docencia. Imparto clase en la Universidad Autónoma, pero también desarrollo gran parte de mi actividad docente con personas refugiadas, apoyo su aprendizaje a través de la colaboración con los Centros de Acogida a Refugiados, CEAR o ACNUR.
Aficiones: Mi actividad docente es para mí una gran afición de la que disfruto muchísimo, pero también me apasiona leer y escribir poesía. Ambas cosas las hago desde siempre, prácticamente desde que empecé a leer y escribir. Recuerdo que, a los siete años, gané mi primer premio de poesía en el colegio, ¡todo un acontecimiento que nunca olvidaré! El galardón: un precioso libro de poesía para niños que abonó aquella pasión incipiente.
Rasgo más sobresaliente de tu personalidad: Creo que lo que más me caracteriza es mi capacidad de trabajo, así lo manifiestan también las personas que me rodean y me conocen bien. También creo que tengo capacidad para la empatía. Es un estado de conciencia que procuro potenciar para que se extienda a todos los seres que son capaces de sentir alegría, tristeza o dolor. Aunque conmoverse con las aflicciones de los demás no contribuye a hacer la vida más fácil, creo que es un camino ineludible para ser mejor persona.
Cuéntanos por qué decidiste ser escritora: No fue fruto de una decisión; tampoco el resultado de una reflexión. Surgió espontáneamente cuando adquirí la habilidad para leer y escribir. Mi madre cuenta que de niña leía con fruición, casi compulsivamente. Nuestra situación económica no era holgada y ella relata cómo le fiaban los libros infantiles para tratar de saciar mis incipientes pero voraces ansias de lectura. Y así sigo. Para mí un buen día se define por las horas que dejan el resto de mis actividades para sentarme frente a un libro.
Autores preferidos y por qué: Adoro la poesía de Antonio Machado, Federico García Lorca y Miguel Hernández. Seguro que sus versos han alimentado los míos, porque los he leído mucho. Últimamente disfruto especialmente la prosa de JM Coetzee, no solo por su calidad y belleza, sino también porque incide en reflexiones que también a mí me alcanzan. Como él, me siento muy interpelada por cuestiones como el colonialismo, la vejez y la enfermedad o el especismo.
Tu obra favorita de otro autor: Elizabeth Costello, de JM Coetzee, porque encuentro entre sus páginas un eco, expresado de una manera bellísima, eso sí, de mis propias reflexiones, preocupaciones y sentimientos. En pocos libros he encontrado un reflejo tan fiel de mis propias cavilaciones.
Tu obra favorita de las que has escrito: Alma me ha permitido poner mi voz al servicio de los que no la tienen. Eso es para mí algo realmente importante.
Tu estilo literario: Escribo poesía desde siempre. Cualquier cuestión a la que quiera dar voz se me derrama ya hecha un manojo de versos sin que pueda evitarlo.
Una cita de un autor que te guste: “La verdadera prueba de la moralidad de la humanidad, la más honda (situada a tal profundidad que escapa a nuestra percepción), radica en su relación con aquellos que están a su merced: los animales”. Milan Kundera
Obra en la que te encuentras trabajando en la actualidad: Sigo escribiendo poesía, aunque esta vez no exista el propósito firme e inalterable que sirvió para la configuración del marco temático de Alma.
Algo sobre tu manera de entender este mundo: Creo que hay que volver a la bondad, esa forma de ser tan menospreciada y vilipendiada en nuestra sociedad. Estoy convencida de que hemos de cultivar y transmitir un carácter dulce, empático y magnánimo que sea capaz de desterrar el ego que gobierna actualmente en nuestras sociedades y nos salve de caer en una maldad normalizada y largamente justificada. Solo el giro hacia la generosidad y la empatía puede salvarnos.
Tus proyectos inmediatos: Seguiré acompañando a muchas personas en su aprendizaje. Este es un hermoso camino de ida y vuelta, por lo mucho que yo también aprendo de ellas y, claro, trataré de publicar los versos que sigan brotando.