Resido en Melilla, una bonita y pequeña ciudad española norteafricana, y estoy divorciada y vuelta a casar desde hace diecisiete años.

Nací hace cincuentaicinco años en Sevilla. Mis padres se trasladaron a Melilla, de donde ambos eran oriundos a muy temprana edad, donde pronto comencé mis estudios de piano .A la enseñanza de la música es a lo que he dedicado mi vida. Terminé mis estudios musicales en Madrid y luego realicé un posgrado en Budapest. Recientemente he empezado a componer y también a escribir, dos facetas nuevas en mi vida, que me han llegado ya con la madurez.

Aficiones: Me gustan la lectura, el mar, las plantas y las antigüedades. También la pintura, especialmente la abstracta. Me encanta perderme en un buen atardecer en la playa y también en un cuadro abstracto. Y también en una obra de Bartók.

Rasgo más sobresaliente de tu personalidad: Yo creo que el rasgo más sobresaliente de mi personalidad es la curiosidad. Me encanta llegar al fondo de las personas y también de las cosas, algo que se está perdiendo en este mundo digital de la imagen, donde se supone que una imagen nos lo dice todo y es la mayoría de las veces información superficial. Me encanta el trato humano, algo que he tenido mucho en mi vida a través de la enseñanza musical.

Cuéntanos por qué decidiste ser escritora: Me he iniciado en el mundo de las letras por necesidad, con un poemario, Las cenizas del tiempo, que escribí con las tripas y también con el corazón. .Las palabras salieron solas como desde muy dentro y apenas realicé correcciones. En unos meses saldrá Jus, Juris, otro poemario muy diferente, que tiene de trasfondo el funcionamiento de la justicia en nuestro país y la conciencia como individuo que tenemos como sociedad , un poco o muy embrutecida emocionalmente hablando.

Autores preferidos y por qué: Pues acababa de releer a Lorca justo antes de escribir Las cenizas del tiempo, y tal y cómo me fluían las palabras parecía que me las estuviera dictando alguien desde el otro mundo. Me gusta Carmen Laforet, por su sinceridad en Nada y John Kennedy Toole, en La conjura de los necios, por su peculiaridad personal y su forma de describirse a sí mismo, su ironía y su rotunda verdad  .Acabo de leer El hijo del héroe, de Karla Suárez, recomendación de mi hija Delia que es la doctora en filología de la familia.

Tu obra favorita de otro autor: Pues la verdad es que no tengo una obra favorita. Quizá El lazarillo de Tormes. Ahora estoy leyendo a Shakespeare en una vieja edición traducida al español de los años sesenta. Tarea ardua porque son más de tres mil páginas escritas con letra menuda. Pero no quiero morir sin haber leído a Shakespeare completo. (Risas).

Tu obra favorita de las que has escrito: Pues he escrito tres: Las cenizas del tiempo, Jus, Juris, y mi primera novela Las invenciones de Bach .La primera está editada en Adarve editorial, colección verso y color. Acabo de firmar el contrato de la segunda, Jus, Juris, otro poemario, y cuando tenga lista la novela, Las quince invenciones de Bach, se la pasaré a Pilar Lozano para ver si merece que la incluyáis en vuestro sello editorial.

Tu estilo literario: La poesía cuando la busco me encuentra muy fácilmente. Será por su relación con la música, con la sonoridad de las palabras y su contacto directo con la emoción. La novela es más lenta, más cotidiana, menos expresiva. Por eso me gusta tanto el libro de Karla Suárez El hijo del héroe, porque termina en la última línea, tiene su punto culminante como diríamos en música justo al final, y el Lazarillo porque está plagado de ellos.

Una cita de un autor que te guste: “A veces se gana, a veces se pierde. A veces se gana más cuando se pierde”. Esta frase es de mi hija Delia García, la filóloga de la familia.

Obra en la que te encuentras trabajando en la actualidad: Pues estoy revisando Las quince invenciones de Bach, que me aventuré a escribirla a boli en una libreta de las gordas y ahora tengo que copiar y revisar en el ordenador.

Algo sobre tu manera de entender este mundo: Pues mi motor es la esperanza. Esperanza en que algún día puedan cambiar los paradigmas que parecen inamovibles y las sociedades evolucionen hacia modelos más sostenibles e igualitarios. Pero no hablo de comunismo. Hablo de postcapitalismo, o capitalismo ético.Porque este mundo necesita un cambio, pero desgraciadamente la intelectualidad cada vez está más alejada de la política y parece que nos movemos como borregos al matadero. Hacen falta ovejas negras, y muchas.

Tus proyectos inmediatos: Me gustaría poder dar a conocer mi obra, pero seguir siendo una persona anónima. Mi proyecto más inmediato es terminar de adecentar mi novela.