Vivo en las islas Canarias desde joven. Aquí llegué con veinticuatro años y eché raíces, casándome y formando una familia. Hoy, estoy jubilado.
Nací en Ahigal, pueblo de la provincia de Cáceres, tierra de emigrantes, debido a su bajo nivel de vida y escasas oportunidades de superación, en donde se sobrevivía, pero poco más. El que lea o haya leído Los santos inocentes de Miguel Delibes o visto la película, entenderá lo que digo por el retrato real que hizo de aquella tierra, tan querida para los extremeños y tan añorada para los que un día nos marchamos de ella.
Salí de allí con los estudios primarios en mi maleta y muchos sudores a mi espalda e ilusiones de futuro. Tuve la suerte de poder estudiar después la EGB y BUP. Doble suerte, diría yo, porque me tocó hacerlos dos veces. ¿Que cómo puede ser eso? Pues la primera en Colegios e Institutos y la segunda cuando me presenté a oposiciones y me examinaron de los estudios que ya tenía reconocidos por el Ministerio de Educación y Cultura. Y aquí, no valía sacar el cinquillo para aprobar, sino estar entre los primeros para llevarte la plaza a la que opositabas. Eso afianzó fuertemente mi cultura.
Mis aficiones: La literatura, la pesca, el campo. Me crié en plena naturaleza y supe escuchar sus mensajes y fundirme con ella. Así aprendí tantas cosas que me llevó a quererla, porque al fin es nuestro todo. El día que ella muera, moriremos. Por eso en mis poemas está casi siempre presente, de una u otra forma.
Rasgos más importantes de mi personalidad: La perseverancia, nunca me doy por vencido. La sencillez. Nací humilde y así seguiré hasta el fin de mis días. A veces, cuando otros alaban mis méritos literarios, me digo: «quieto, los pies en el suelo», porque a la larga, estas cosas pueden ser flor de un día y la vida sigue su ritmo. Todo en su justa medida. La capacidad de reflexión, la de trabajo y confianza en lo que hago son otros de mis rasgos.
Por qué decidí ser escritor: En el pueblo vecino al mío había vivido y muerto el poeta José María Gabriel y Galán. Nuestros abuelos lo conocieron en vida y nos hablaban de aquel hombre. En cada casa había libros de él y sus lecturas nos llegaban a lo más hondo, porque nos veíamos reflejados en ellas. Cantaba al campo, las penas y miserias de entonces, los amores y desamores y todo cuanto se refería a la vida cotidiana, en un estilo sencillo y en lengua extremeña, además de en castellano. Entonces me aficioné a su lectura y me enamoré de su poesía, que era la única que conocíamos por allí.
En segundo de BUP opté por la rama de letras y trabajé y analicé la literatura que va desde la antigüedad hasta la generación del 27, y empecé a escribir poesía en verso rimado y estilo gabrielano. Así compuse tres poemarios, obtuve cinco premios y me atreví —porque la ignorancia es atrevida— a enviar un texto a una editorial. Otra vez tuve la suerte de mi parte: el editor, en lugar de contestarme con la consabida carta: «no está en nuestra línea editorial», me escribió diciéndome: «es usted buen versificador, pero sus versos son arcaicos. Le aconsejo que estudie literatura creativa para ponerse al día, tanto en poesía como en técnicas» y me habló de los talleres literarios. Y ahí empecé mi andadura, durante cinco años, unas veces de forma presencial, otras virtual y adquiriendo buenos libros de autoayuda. Conocí y trabajé el verso libre y estudié a los grandes de las generaciones del siglo XX.
Mis autores preferidos y por qué: Jorge Manrique, por sus Coplas a la muerte de su padre donde, dejando a un lado lo cancioneril de la época, se adentró en el Pensamiento filosófico, adelantándose con ello a la literatura del Renacimiento, en la que lo profundo era preferido a lo bello.
Garcilaso de la Vega, por haber introducido en España la literatura italiana, estrofas en endecasílabos, versos más fluidos que los que se venían escribiendo y por su estilo limpio y elegante.
Gustavo Adolfo Bécquer, por su exquisitez y delicadeza.
Gil de Biedma, por la fuerza y profundidad de sus versos.
Luis García Montero, por sus imágenes y por la paz que produce al leerlo.
Comenté antes que Gabriel y Galán me había influenciado, pero al conocer el verso libre me propuse buscar mi propia voz y creo que hoy escribo como José María García Plata. Es importante leer mucho a los buenos poetas, pero sin que te influyan para evitar ser sucedáneo de nadie y, a veces, sin pensarlo, tomar préstamos de ellos que tan poco favorecen a la larga.
Mi obra favorita de otro autor: Habitaciones separadas de Luis García Montero. Y dentro de ella, el poema Aunque tú no lo sepas. Es un poemario en el que no eleva la voz. Te sumerge en ese bienestar nostálgico, como si estuvieras desde tu casa disfrutando de una tarde de lluvia suave que empapa los campos sin menoscabarlos un ápice. Imprime paz.
Mi obra favorita de las que he escrito: Palabras y suspiros en el aire, II. Inédita aún, pues no la he presentado a ninguna Editorial. Creo que hay en ella mayor madurez que en las demás.
Mi estilo literario: Poesía. Siempre digo que se escribe desde el corazón, aunque se corrija usando el cerebro. Por eso, el disfrute de una creación poética es grande, produce en el autor —hablo desde mi experiencia— las mismas sensaciones, emociones y sentimientos que vas a transmitir al lector.
También he escrito novela policíaca. Pero en este género sufro con el sufrimiento de los personajes, y me angustio. A mí me gusta la felicidad y la paz hasta en la ficción.
Y escribí también una novela realista. Me resultó más llevadera que la policíaca. Ambas las mandé a una editorial y me las devolvieron. Digamos que me desmoralicé un poco y no las he vuelto a presentar.
Una cita de un autor que me guste:
«Algún día en cualquier parte, en cualquier lugar indefectiblemente te encontrarás a ti mismo, y ésa, sólo ésa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas».
Pablo Neruda
Obra en la que me encuentro trabajando en la actualidad: Estoy trabajando en mi sexto poemario. No sé qué título le voy a poner todavía.
Algo sobre mi manera de entender este mundo: Complicado de entender: ¿por qué esas diferencias sociales, culturales y de entendimiento? ¿Por qué a naciones pobres, como las de África subsahariana, teniendo una tierra productiva y ríos que las atraviesan, no se les construyen pantanos, canalizaciones de regadío y se les enseña a trabajar, para que no tengan que salir en pateras en busca de lo más básico del ser humano que es el derecho a la nutrición? En esta línea me perdería en preguntas, en las que veo fáciles soluciones, pero parece que a nadie le interesan.
Mis proyectos inmediatos: En lo literario, seguir escribiendo mientras pueda. En lo personal, soy feliz con lo que tengo. Y cuando se es feliz, mejor es no tentar a la suerte.
Quiero informaros que colaboro con las Revistas literarias: Ahigal, Moonmagazineinfo, Azahar, De sur a sur y Dragaria, así como con las emisoras Acrópolis Radio y Radiosatelitevisión-Américavisión. En esta última produzco y conduzco un programa titulado Mundo literario, con escritores, poetas clásicos y contemporáneos; se emite los miércoles con repetición los viernes a las 10 hrs. de Chile, ubicación de la emisora, 17 hrs. de España. Al final recito alguno de mis poemas y hablo de mis libros.
Premios literarios obtenidos: (De poesía)
2º de Gabriel y Galán.
2º y 3º de Exaltación al olivo.
2º de Leonor Pérez Cabrera.
Relato
1º Experiencia y vida.
Eventos
1º premio Mi ciudad.
2º Día del escritor.
3º Mujer, hoy y mañana.
He sido finalista en muchos certámenes y mis poemas y relatos constan en diversas antologías publicadas por los convocantes a los premios.