Mi nombre es José Antonio Martín Acosta y resido en uno de los rincones más hermosos de Bizkaia, Karrantza. Nosotros lo llamamos West Bizkaia porque está al extremo oeste de la provincia. Rodeado de naturaleza, contribuye a crear el ambiente necesario para inspirar tanto mi poesía como mi novela.
De mis 50 años llevo tres residiendo en este entorno inigualable. Viví en Bilbao 19 años y el resto en Trapagaran, el pueblo de la Zona Minera de Bizkaia que me vio nacer. Además tengo la suerte de estar casado con una maravillosa y radical mujer, Zuriñe Ojeda, que es la inspiración de todo lo que hago, y más concretamente, del último libro que he escrito: El Zurinauta.
En cuanto a mi biografía decir que he trabajado principalmente en el mundo de la limpieza industrial, puedo decir que he limpiado portales, casas, garajes, barcos y trenes, sólo me falta limpiar la Estación Espacial Internacional y ya seré todo un profesional. Además he trabajado doce años en un cine, yo era el que ponía la película y saludaba desde arriba. Si alguna vez me has visto es que no te ha gustado lo que estabas viendo, si no es que hice bien mi trabajo. Por último me he dedicado a formar grupos de captadores de socios para una ONG en Bizkaia, Cantabria y Asturias. Ahora soy el director del Diario digital El Común. Un periódico militante marxista, feminista radical, internacionalista y antifascista. Luchamos contra el mundo posmoderno que nos ha tocado vivir.
En cuanto a la literatura diré que escribo desde los 18 años y que ya llevo más de 9000 poemas escritos. He publicado dos libros de poesía con la Editorial Cardeñoso (Vigo): Sonrisa Diagonal con Posdata (1996) y Triste Afán de la Locura (2001). En 2004 y en el 2010 participé en las antologías Vivir Soñando y Años Maduros (Centro de Estudios Poéticos, Madrid), y años después participé en la Antología Poética 2020 del grupo Poetas en Mayo de Vitoria-Gasteiz. He ganado diversos premios de poesía de carácter local y fui finalista del XXI Premio de Poesía Lasarte-Oria 2007. En 2015 publiqué mi primera novela con la Editorial Arte Activo (Vitoria): Eguzkilore, de Diosas y hombres. Y poco después la novela fantástica Entropía (Arte Activo 2016). Entre 2019 y 2020 he autopublicado: Ojos de Perro, Libélulas, La Poesía del Tú, Inanna´s Song, Absenta, Poesía Zombi, Música Profana, La Ira de la Alquimia y 99 días y 1 estado de alarma y en 2021 publiqué mi tercera novela, Ensayo sobre la Violencia, manual de instrucciones del perfecto psicópata y los poemarios La Basura es una Tragedia Acabada y Poemas para una Nueva Revolución. En 2022 salió a la luz mi cuarta novela, Neanderworld, Voluntad de Poder (Íbera Ediciones). En este año 2023 he publicado con esta editorial, Adarve, El Zurinauta.
En cuanto a los estudios diré que soy Diplomado en Educación Infantil por la EHU-UPV, Licenciado en Historia por la UNED y Auxiliar de Biblioteca por la UNED Bergara.
Aficiones: Pero no todo tiene que ser literatura, una de mis aficiones preferidas es el Basket, tanto practicarlo como verlo por TV. Me gusta la NBA y disfruto mucho de todo lo que rodea a esa liga deportiva. Me gusta nadar y dar paseos con mi mujer además de visitas culturales. Cada vez que visito un Museo no me voy hasta que no he visto y leído todo lo que haya dentro de él. Salvo en una ocasión, cuando visité el Louvre, no me dio tiempo. Además me relaja mucho construir con lego, sobre todo naves espaciales de la saga Star Wars de la que soy un fanático. Me gustan todos los juegos de construcción, de madera, de papel, de piezas. También disfruto mucho viendo series de TV.
Rasgo más sobresaliente de tu personalidad: Qué difícil resulta autoanalizarse, el rasgo más sobresaliente de mi personalidad es mi tozudez. Llevo más de treinta años deseando hacerme un nombre en el mundo literario. No lo he conseguido pero continúo intentándolo. En cierto modo es como escribir una novela. Se presentan inconvenientes todo los días y hay que superarlos. A veces se parece más a la poesía porque se necesita mirar dentro de uno mismo para poder recoger parte de ti y trasladarlo a la escritura, pero también mirar dentro para ver lo que ven de fuera y que eso ayude en tu forma de escribir. El oficio de escritor es un oficio de depuración de la técnica. Es un oficio de aprendizaje continuo y el único modo de aprender de esto es leyendo mucho y escribiendo mucho. Como decía Picasso, cuando venga la inspiración que me pille trabajando. Es un proceso de autorreconocimiento. Obstinarse con seguir a pesar de todo. Continuar. Avanzar. No ceder ante las dificultades. La vida es eso.
Cuéntanos por qué decidiste ser escritor: Uno no decide ser escritor porque sí. Le viene dado cuando se encuentra frente a frente con un modelo a imitar. A mí me sucedió un 10 de septiembre de 1991. Estaba yo con mi amigo Enrique Madrazo, también escritor, en la biblioteca de Trapagaran, mi pueblo. Leía las Rimas y Leyendas de G. A. Bécquer y allí supe que yo quería hacer eso el resto de mi vida. Desde entonces siempre he tratado de construir mi vida alrededor de ese hecho. Trabajase en lo que trabajase sacaba tiempo para escribir y para trasladar al papel lo que sentía. La cuestión es que existe en mí una necesidad de escribir. Es como el hambre o la sed. No puedo pasar mucho tiempo sin escribir porque siento que me voy marchitando poco a poco. Es una necesidad vital. Luego hay razones que te impulsan a escribir de una cosa y no de otra, razones políticas, personales, generacionales que también tienen cabida en la obra de cualquier escritor. Yo me considero Comunista así que la lucha de la clase obrera es un motivo en mi poesía. Por supuesto que también escribo sobre el amor.
Autores preferidos y por qué: Tengo muchos autores preferidos. En poesía, Federico García Lorca, Bécquer (ya he explicado que me hice poeta gracias a él), Neruda, Cernuda, César Vallejo, Alberti, Miguel Hernández, Aleixandre, Pedro Salinas, del que he asumido su estilo poético a la hora de escribir de amor, su libro “La voz a ti debida” ha inspirado infinidad de poemas míos; Vicente Huidobro, de él me quedo con su creacionismo del que bebo también en mi poesía. Es necesario decir varios poetas de poesía social de los que también soy deudor, Blas de Otero, Jaime Gil de Biedma, Dámaso Alonso, Gabriel Celaya, del que considero autor del mejor poema de todos los tiempos, La poesía es un arma cargada de futuro. También bebo bastante de Walt Whitman, de Sylvia Plath, de Idea Vilariño, de Gabriela Mistral, de Alejandra Pizarnik que creo que casa muy bien con mi forma de entender la poesía. De los poetas contemporáneos me quedo con Luis García Montero y con William Ospina. Y lo que se sale de la poesía es muy clásico, es decir, me gusta leer novela clásica, desde los griegos, Sófocles, Eurípides, Homero, etc. hasta Dante, Ovidio, Maquiavelo, Tomás Moro o más modernos como Cervantes, Tolstoi, Dostoievski, Victor Hugo. También está mi faceta filosófica, me encanta leer a Marco Aurelio, Aristóteles, Platón, Marx, en fin un abanico muy amplio.
Tu obra favorita de otro autor: Hay una obra que me parece genial, se trata de El Principito, de Saint-Exupéry. La gente piensa que se trata de un libro infantil. Nada de eso. Se trata de la exposición de tipos humanos más maravillosa de la historia de la literatura. Expresa el camino de la amistad como una auténtica Odisea del cariño. Lo habré leído cien veces y siempre me maravillo de su sencillez y de su complejidad y profundidad. Me parece además un gran libro para comenzar a leer.
Tu obra favorita de las que has escrito: De las 18 obras que he escrito yo escojo la última, El Zurinauta, porque lo fundamental en mi poesía amorosa es explorar el amor desde una perspectiva igualitaria. La amada no permanece estática esperando ser conquistada, amada o salvada sino que se constituye en actriz principal que no espera sino que actúa, que no se deja amar sino que ama, que no se deja buscar sino que es la buscadora. En El Zurinauta, la mujer canta junto con el hombre. Ama abrasadoramente, comete locuras, salva y ejecuta. Esta concepción se enmarca en la lucha objetiva por la igualdad y por el feminismo, que constituye el último reducto de humanismo que nos queda. La gran esperanza salvífica. La última frontera. Un recorrido por el mundo mágico de la ausencia. Un viaje desde las entrañas de la tierra hasta lo más profundo de los valles porque el amor es ese viaje y lo que media entre la ausencia y la llegada. Los amantes se buscan y van expresando su angustia por el otro. Como decía el poeta irlandés William Butler Yeats, “se encontraba buscando su propio rostro, que ya existía antes que el mundo fuese creado”, de la misma manera El Zurinauta e Inanna se buscan en un mundo sin tiempo, desde el inframundo hasta un lugar extraño en el norte. Lean ustedes este poemario y disfruten del amor en cada parada que os presente la vida, no hay viaje más hermoso, ni mejor resultado que acoger el amor entre los brazos para no permanecer quieto mientras el alma se desviste.
Tu estilo literario: Mi estilo literario encuadra diversos mundos. He bebido de la poesía social durante mucho tiempo y soy de los que opinan que la poesía puede hacer la revolución, o al menos contribuir a ella. La lucha por la justicia y por la igualdad también es una lucha de ideas y de épica y de eso sabe mucho la poesía. Pero he bebido también de las vanguardias artísticas, del simbolismos francés, del creacionismo de Huidobro, del surrealismo, del realismo, de la poesía del 27, de la del 50, de la poesía de la experiencia y por eso mi estilo poético tiene un poco de todos estos mundos, es muy ecléctico y heterogéneo. Eso sí, casi siempre uso el verso libre. En cuanto a mi novela siempre uso mucho la fantasía. Los mundos imaginarios, la ciencia ficción y el valor de la igualdad entre mujeres y hombres. Tiendo a ser también muy justiciero porque considero que el mundo en el que vivimos carece por completo de justicia. No hay mas que ver lo que ocurre ahora en Palestina y el poco apoyo que tienen las personas que defienden su tierra.
Una cita de un autor que te guste: Una cita que siempre me ha convencido y que, en cierto modo, me ha convertido en poeta es una de Gustavo Adolfo Bécquer: “Todo el mundo siente. Sólo a algunos seres les es dado el guardar, como un tesoro, la memoria viva de lo que han sentido. Yo creo que éstos son los poetas. Es más, creo que únicamente por esto lo son.” Leyendo esta cita llegué a la conclusión de que yo quería ser poeta.
Obra en la que te encuentras trabajando en la actualidad: En la actualidad estoy escribiendo la segunda parte de la novela “Neanderworld”; además una novela que estoy publicando por capítulos en el Diario digital El Común, llamada “Claustro” y varios poemarios, el último de los cuales tengo ya muy avanzado. Hablo en él de la vida, del oficio de escritor, del azar del futuro que nos espera. Lo llamaré “La desproporción áurea”.
Algo sobre tu manera de entender este mundo: Soy un revolucionario sin revolución en un mundo posmoderno donde las ideas han muerto y la libertad significa mercantilización en todas las facetas de la vida. El hecho de que, en nuestro tiempo, los grandes relatos civilizatorios, como el marxismo, hayan muerto nos deja solos ante la posibilidad del avance social. Lo único que podemos hacer es confiar en el regreso del marxismo, en el ascenso del feminismo como último reducto del humanismo y en el antifascismo como solución.
Tus proyectos inmediatos: En lo personal lo único que busco es seguir en este valle donde vivo felizmente con mi mujer y que el periódico donde soy director se convierta en un referente marxista, comunista, feminista, anticolonialista, antifascista e internacionalista que nos lleve hacia un mundo multipolar donde los USA no sean los únicos en poder imponer sus ideas y sus leyes sobre el resto. Leyes que ellos mismos ni siquiera cumplen. Solo un mundo multipolar puede evitar las guerras y llevarnos a una senda de cooperación. Aceptar al diferente y compartir son dos elementos indispensables para la paz y para conseguir erradicar el hambre y las desigualdades. No puede ser que continuemos existiendo en un mundo donde el 1% posea el 99% de los recursos. Me niego a creer que eso no pueda ser cambiado. Las utopías han de regresar para dar un poco de esperanza al mundo.
