La revista Semana realiza una reseña del último libro de Blanca Poza, El niño que quiso ser lluvia, una novela denuncia que muestra la cruda realidad de tantos niños que sufren el rechazo y los abusos dentro de su entorno más próximo o, lo que es mucho peor, dentro de su propia familia.

Tres historias que se trenzan entre sí para formar una sola, en un intento de denuncia que esta escritora toledana nos presenta mediante la cruda realidad que afrontan los niños desde la perspectiva de Vicente, su protagonista.

El niño que quiso ser lluvia nos habla de Vicente y las dificultades a las que se enfrenta desde su infancia. Su meta es convertirse en un prestigioso abogado especializado en la defensa de menores maltratados y víctimas de abusos sexuales. Pero Vicente no lo tiene fácil, mientras él continúa luchando por encontrar a alguien que le ame y dejar atrás su pasado lleno de soledad, dolor y tristeza, su propio instinto le incita a convertirse en un depredador sexual. Pura, su madre, limitada por los prejuicios de la sociedad rural en la que vive, se ve obligada a renunciar a sus sueños. Valentina, de quien Vicente está enamorado desde niño, reaparece en su vida y mantienen una relación a través de una plataforma de citas sin que ella sepa que se trata de él.

Blanca Poza ha dirigido, a lo largo de su trayectoria profesional, a varios grupos de trabajo y, además, es autora de la novela Mi cuerpo, la cárcel. Mi alma, la libertad, donde se narra la vida de mi amiga Carmen Ramírez Pérez, enferma de esclerosis múltiple. Ahora nos presenta El niño que quiso ser lluvia, una novela denuncia, impactante y necesaria.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies