Soy un médico que disfruta con su profesión pero también le gusta juntar letras. Vivo en Madrid.
Nací en Vitoria y estudié en los «Marías» de allí . Ya de mocito, me trasladé a estudiar Medicina a la vecina ciudad del «pañuelico rojo». Acabada la carrera, tocaba seguir «hincando codos» y centrarse en el archiconocido MIR. Hubo suerte y lo saqué a la primera. Pude elegir la especialidad que pinta ir en la sangre de mi familia, la Oftalmología. Escogí el Ramón y Cajal y ahí sigo, espero que con la satisfacción de mis pacientes.
Aficiones: Me gusta la Historia, malo sería que no me gustara y hubiera escrito una novela histórica; hacer deporte y conocer nuevos lugares y gente.
Rasgo más sobresaliente de mi personalidad: Soy tímido, por suerte lo voy superando, más me vale. Me gusta ir al grano y la gente sencilla. Siempre puedes aprender algo de quien menos te lo esperes. No me gusta divagar ni dar rodeos.
Por qué decidí ser escritor: Creo que escribir una novela y que el público la lea y disfrute es un hecho mágico.
Siempre me ha maravillado que un escritor sea capaz, con lápiz y papel o con un modesto ordenador y su imaginación, de llegar a millones de lectores en todo el mundo. Conseguir sin un esfuerzo especial que la gente disfrute o que los malos ratos sean más llevaderos entra casi más en el campo de la magia. Todo esto se une a que el escritor, el dador en este caso, también disfruta con la redacción de la novela. Lo dicho, pura magia.
Dos sucesos me animaron a asumir el reto de escribirla:
Un día me encontraba «trasteando» con el ordenador y di con el número de expediente de depuración de mi abuelo, maestro de Araya (Álava). Me picó el «gusanillo» y acudí al Archivo General de la Administración en Alcalá de Henares donde me encontré con más de cien documentos que rebosaban miedo e inquietud en ese expediente. Esa fue la llama que prendió la mecha.
El segundo también fue casual. Suelo acostumbrar a leer el Correo por el ordenador, periódico de Vitoria, para estar más o menos al día de lo que pasa por mi tierra. Ahí di con un artículo en el que se comentaba el olvido en las que se encontraban los 17+1 fusilados en 1937 en el pueblo alavés de Elosúa (Elosu).
Me interesaron ambos temas y profundicé en ambas historias, con un lazo común que se ve reflejado en la novela.
Mi autor preferido y por qué: Es difícil elegir uno. Me quedaría con Miguel Delibes. Me encanta su lenguaje popular de campo de Castilla la Vieja, claro y sencillo. He pasado grandes momentos transportándome a ese campo y a la naturaleza que lo rodea.
Mi obra favorita de otro autor: Sin duda El Quijote, antiguo y actual. Con reflexiones que nunca caducan.
Mi obra favorita de las que he escrito: Ahora estoy con mi tercera novela, pero publicadas, por el momento, solo una, 17+1.
Mi estilo literario: Mi primera novela es histórica, la segunda, sin embargo, es negra. Creo que mi estilo es sencillo y directo, pero intento darle importancia a la forma. Muchas veces, doy mil vueltas a una frase hasta que me gusta como queda.
Una cita de un autor que te guste: Hay muchas y muy buenas. Ahora se me ocurre esta, que lleva mucha verdad dentro:
«En la vida hay algo peor que el fracaso: el no haber intentado nada»
Franklin D. Roosvelt
Obra en la que me encuentro trabajando en la actualidad: Quiero acabar mi trilogía sobre el País Vasco. La primera, 17+1, sobre la Guerra Civil, la segunda, una novela negra en un pueblo de la Euskadi profunda y la que estoy escribiendo, sobre el País Vasco actual y el terrorismo.
Algo sobre mi manera de entender este mundo: Una es obvia, escribir y leer. Repasas Historia y vas creando progresivamente, lo que contribuye a realizarte personalmente. Por suerte, no deja de ser un hobby y no dependo de la escritura para vivir. Muchas veces, pienso en lo duro que tiene que ser para la multitud de escritores con talento que hay en Hispanoamérica, centrados solo en la escritura, el no poder encontrar medios para divulgar su brillante novela. Injusto pero real como la vida misma.
Mis proyectos inmediatos: Quiero acabar mi tercera novela, ser razonablemente feliz y seguir progresando en conocimientos y habilidades de mi profesión como oftalmólogo.