Me llamo Shamli, en hindi «Dios va a venir». En la cultura india esto sucede al atardecer, así que, «hola, me llamo Shamli, o atardecer». Me besé con la escritura a los 13 años y desde entonces me acompaña, voluntaria o involuntariamente, este impulso frenético de expresar lo que siento, dándole forma para que otros puedan también identificarse. Primero llegó Palabras sueltas que unidas quisieran ser poesía, un tímido intento de revelar quién soy. Luego nació Ascenso, una verdadera declaración de amor a la vida. Ahora, a los veintiocho, después de tres años llenos de dudas, llega este libro, que surge de una necesidad profunda de recapitular todas mis vivencias hasta ahora, de sostenerlas en las manos, como si fueran tierra mojada, y disfrutar su aroma. Porque para mí no hay nada más poderoso que bailar bajo la lluvia; significa que estás viva.

ISBN: 979-13-87612-20-7

ISBN digital: 979-13-87612-21-4

Depósito legal: M-27059-2024

Número de páginas: 72

Formato: 150×230

Autor: Shamli Moreno

Sinopsis: 

Es este un viaje de vida contado a través de las fases del agua. Desde la evaporación hasta la lluvia, cada fase del ciclo representa una etapa crucial en la búsqueda de identidad y pertenencia. Con el aroma de la tierra mojada como símbolo de renacimiento, habla del abandono, del amor y del autodescubrimiento. Una historia de transformación, en la que cada emoción y cada pérdida se disuelven para formar algo nuevo, como gotas que encuentran su propósito al caer en tierra fértil para volver a nacer. Este libro es un recordatorio de que, al igual que el agua, todos cambiamos y en cada final se oculta el inicio de un nuevo ciclo.

Leer primeras páginas

Háblanos un poco de ti:

Soy una amante de las palabras y las emociones que encuentran refugio en ellas. A los 14 años descubrí que mi mente es como un cuaderno siempre abierto, donde las experiencias cotidianas se transforman en poesía, o eso intentaba, empezó siendo un paseo y acabó siendo el camino de mí vida.

Escribo porque en un mundo que se mueve tan rápido, creo que los versos son un modo de detener el tiempo. Entre cafés y momentos de introspección, he aprendido que las palabras son como el amor: a veces suaves, a veces dolorosas, pero siempre necesarias.

Mis poemas son fragmentos de lo que he perdido y encontrado; una conversación íntima entre mi alma y el papel. Porque, al igual que el petricor, creo que los versos también tienen un olor: el aroma de lo que dejamos atrás, pero que nunca dejamos de ser. Porque, al final, ¿qué es la poesía si no el arte de hablarle al universo y sin esperar que te responda?

¿Qué podremos encontrar entre las páginas de Petricor?

Entre las páginas de Petricor encontrarás aquello que busques… o quizás aquello que no sabías que estabas buscando y, sin embargo, encuentras. Puede ser una emoción olvidada, una imagen que despierta tus sentidos o simplemente el disfrute de algo que te provoca sensaciones inesperadas.

Así es el arte: una búsqueda constante de la provocación, una experiencia profundamente subjetiva y, al mismo tiempo, íntimamente identitaria. Para mí sería un regalo que cualquier persona se sentara a tener una conversación conmigo a través de mis páginas.

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

Me encanta cocinar, a veces me pierdo o me salto pasos en una receta, y curiosamente no se si por suerte del azar o por que salgo siempre indemne de todo lo que hago sabe bien. Creo que Petricor tiene ese mismo sabor: sabe a reconciliación. Es un abrazo con todas las etapas de mi vida hasta ahora, mis 28 años, con sus dulzuras, sus amarguras y ese aroma inconfundible que dejan las tormentas cuando finalmente pasan. Este libro es como una receta imperfecta pero genuina, donde cada verso lleva una pizca de mí.

¿Qué quieres transmitir a través de este libro?

Que al fin y al cabo todo es más sencillo cuando aceptas lo que viene, que estamos intrínsecamente conectados con elementos de la naturaleza, el agua y yo siempre hemos tenido una conexión especial. Me gustaría que este libro fuese el silencio que hay debajo del agua cuando decides hundirte en las clases de natación de la infancia, o el sonido de una ducha relajante después de un día difícil. 

¿Cómo describirías tu trayectoria de escritor desde la primera publicación hasta esta última?

Mi trayectoria como escritora comenzó cuando tenía apenas 14 años. Escribir fue un refugio para todas las incomprensiones que cargaba desde niña; de pronto, el mundo adulto parecía entenderme, o al menos me escuchaba. Ahora, como adulta, me doy cuenta de que tal vez sigo buscando lo mismo: Ser comprendida, leída disfrutada.

La primera vez que publiqué un libro apenas había rozado la mayoría de edad. En aquel entonces, creía saber tanto… pero hoy veo que sabía mucho menos de lo que imaginaba. Sin embargo, hay algo mágico en esa inocencia. Ahora, mirando los tres libros que he publicado, entiendo que hay una continuidad en ellos, como capítulos de mi vida. Es precioso haber podido plasmar lo que era y lo que soy a través de cada página.

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

El último libro que leí fue una antología de Gloria Fuertes. Siempre he tenido una conexión especial con su poesía, porque tiene una manera de hablar de las cosas sencillas de la vida con mucha honestidad. Me sorprendió cómo, a través de sus palabras, es capaz de transmitir tanta humanidad y emoción, de una forma tan directa y sin adornos. Fue una lectura muy bonita casi como una charla con una amiga que te cuenta sus pensamientos más profundos de manera simple. Me recordó lo importante que es escribir desde el corazón, sin complicarse demasiado.

Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?:

Mi vida siempre ha sido una sucesión de consecuencias no planeadas, a las que, con mi capacidad de adaptación, me he sumado y hasta he aprendido a divertirme en el camino. Así que, para ser sincera, no tengo claro qué vendrá después. Nunca planeo nada con demasiada anticipación y sin embargo necesito todo planeado. Sin embargo, últimamente siento que me está naciendo la necesidad de explorar algo nuevo, tal vez unos video poemas, algo audiovisual bonito y casual que me permita mezclar mis palabras con imágenes. O tal vez una novela… quién sabe. La verdad es que me gusta dejar que las ideas lleguen cuando tengan que llegar.