Las mujeres del Caribe emigran, viven y mueren llevando con ellas las tradiciones de nuestros pueblos, sus costumbres más arraigadas en sus memorias y, aunque vivan en un pequeño rincón del mundo lejos de su querida tierra, la cultiva para sus hijos y nietos en un pequeño espacio lleno de amor a millones de kilómetros con un solo nombre: CASA. El llanto de las palmeras es la historia real de siete mujeres que han vivido, en diferente posición económica, política y social, con sus errores, logros, ambiciones, desilusiones y un solo punto en común: ser, simplemente, cubanas.
María Cutiño nace en un pueblo de pescadores el 20 de mayo de 1954. Es psicóloga, pedagoga y profesora de la Escuela de Secundaria Básica en la especialidad de Biología. Por encima de todo, es cuentera de nacimiento. Convencida de haber vivido una vida llena de buenos y malos momentos, morirá en su cama rodeada de los que la han amado y en presencia de los que la odiaron; saben que los estará esperando. Ella es «el agua que baña el arroyo, como una cascada de hojas que baja de la montaña, como el susurro incontrolable del gorrión, una roca de la costa del Caribe, golpeada por olas que dejan su rastro sobre la arena de las playas blancas, como el olor del café o el sabor de la caña. La madre de la vida, la sensualidad y la armonía, la nieta de la muerte, una hija del Caribe».